Cómo hacer la lista de invitados a tu boda: Lluvia de ideas para decidir a quién invitar
Una boda en España tiene 116 invitados y cuesta más de 24.000 euros, de media. Recortar la lista de invitados abarata costes, pero no es una tarea sencilla: ¿A quién consideras amigo? ¿Qué familiares se quedan fuera? ¿Invitas a los ex?


Llevo años queriéndome casar. ¿Por qué? Por lo obvio: amor y derechos. Pero, sobre todo, por unir a todas esas personas a las que es imposible juntar en el mismo espacio-tiempo. Porque las amigas están repartidas por el mundo, porque vivir ‘cerca’ en una gran ciudad también es lejos y porque es complicadísimo cuadrar agendas en plena era del gran agotamiento donde todo el mundo (obvio) está agotado. Este artículo es un extracto de ‘De Boda’, el boletín de ‘S Moda’ en primera persona sobre cómo se organiza un enlace. Si quieres recibirlo, puedes apuntarte gratis aquí.
Una de las cosas más importantes para nosotros era cuadrar la lista de personas a las que invitar. Y no es fácil. Me lo advirtió mi amiga Tamara: “A la mínima que te pones, se te va a 100 personas”. Uf. Tenía razón. Una boda en España tiene 116 invitados y cuesta más de 24.000 euros, de media, según el Informe del Sector Nupcial 2025 de bodas.net. Así que hablemos sin rodeos: ¿qué haces si no puedes pagar tu lista de invitados ideal?, ¿cómo eliges?

Recortar no es tarea fácil. Lo habitual es empezar a ‘cortar’ por familiares y amigos con los que tenéis menos o. Y en esto no hay aciertos ni errores. (Me parece importante recordar esto: nada está mal o bien, es nuestra decisión y nuestra boda. Lo pongo aquí como mantra para quien nos lea… y para nosotras).
Puede haber más conflicto al elegir a qué amigos invitar, porque ¿a quién consideras amigo? No quiero liaros, pero la amistad puede estar basada en el placer, en la utilidad o en la virtud. No lo digo yo, lo dijo Aristóteles, yo solo lo aprendí en la newsletter ‘Filosofía inútil’ de Jaime Rubio. Os resumo: la ‘buena’ es la basada en la virtud. Son los amigos a los que queremos por cómo son y que nos empujan a ser mejores personas. Los que están para tomar cañas, pero también para aguantar tu audio de 5 minutos tras un día de mierda. No es que el resto de amistades sean ‘malas’, es que suelen ser menos duraderas.
Seguro que a los ‘virtuosos’ los tienes claros (yo mucho). Pero puede ser más difícil si nos alejamos un poco y vamos hacia los que están en “la periferia” de tu vida, los medium friends. Aquellos con los que tienes un vínculo más ligero, con quienes te lo pasas bien, pero a los que te entregas menos. Y de nuevo no hay aciertos ni errores. Pero sí deberías organizar a quién consideras qué… porque, a no ser que tengas un presupuesto infinito, alguien tiene que quedarse fuera.
La amistad también puede brotar en cualquier lugar y a cualquier edad (aunque sea más difícil a partir de los 40), incluso en el trabajo, porque nada une más que un jefe o compañero tóxico… Y vuelvo a Tamara, que me ha enseñado mucho con su experiencia. Para ella, elegir a qué compañeros de trabajo invitar fue lo más complicado, porque ha cambiado varias veces de empresa y mantiene el o con muchas personas. Lo que hizo fue “una especie de M30” en la que dejó dentro a las personas con las que más relación diaria tenía. Hay quien también decide que solo aquellos con quienes tiene vida más allá del trabajo, por ejemplo.

Y, ¿qué pasa con los ex?, ¿se barajan como invitados? No sé si os acordáis, pero Enrique de Inglaterra invitó a varias ex a su boda con Meghan Markle. Las redes ardieron con especulaciones sobre el sufrimiento de estas mujeres por acudir al enlace. Mentira. Eran amigos. Y es que no es extraño que tu expareja pueda ser tu amiga. ¿Por qué no? Tengo muchas amigas que han invitado a sus ex porque seguían siendo amigas. “Fue fácil porque no la veo como mi ex”, “Habíamos mantenido la amistad después de romper la relación”...
Mi cuñada Marta se casó hace 14 años y siempre me cuenta que de los 30 amigos que invitó a su boda ahora solo permanecen la mitad. Es normal. Lo dice con una pátina de nostalgia, pero eso también es bonito, ¿no? La boda muestra un momento puntual de tu vida, es un fiel reflejo de quién eras y cómo era tu entorno en aquella época.
También quiero que sepas una cosa: lo más probable es que haya amistades ‘virtuosas’ que no puedan acudir. Y no pasa nada. Tranquila. Estoy segura de que encontraréis la manera de estar cerca o de compartir ese momento de otra forma. Te lo digo y me lo digo a mi misma. Mi mejor amiga no estará en mi boda. Lo hará por una razón preciosa y que nos hace muy felices. Lo sé hace semanas, pero aún no puedo creerlo, llevamos más de 20 años juntas y cuesta gestionar las expectativas. Cuánto la voy a echar de menos.
Ahora, un consejo práctico que creo que ayuda bastante: ¡haz un excel compartido! Os facilitará mucho la organización, podrás ir sumando o tachando personas de la lista y servirá también para confirmar asistencias, saber quién va a coger el bus o no, alergias o intolerancias alimentarias… Yo tengo varias pestañas: lista, presupuesto, pagos ya hechos…
Lluvia de ideas sobre cómo hacer la lista:
- Fijar un número de invitados en función del presupuesto. Puedes elegir repartir con tu pareja los invitados al 50%, gestionar la cifra total juntos o inventaros otra cosa.
- Hacer dos listas: una reducida, solo con las personas más cercanas y otra más amplia con las personas a las que os gustaría invitar pero que por motivos económicos, de espacio o por la razón que sea, no es posible. Podrás ir engordando la lista más pequeña con la otra.
- Priorizar el lugar y adaptarse, como le pasó a Edu: “Nos acoplamos al espacio que teníamos, así que decidimos invitar a la gente más cercana a la ceremonia y el resto a la fiesta”. Hay muchos lugares en los que puedes añadir invitados solo para el pack de la fiesta, que suele incluir la barra libre, la recena y el Dj.
- Hacer una fiestecita otro día para celebrar con las personas que no puedes invitar al ‘día grande’, pero que también son importantes y quieres compartir un momento especial con ellas.
Este artículo es un extracto de ‘De Boda’, el boletín de ‘S Moda’ en primera persona sobre cómo se organiza un enlace. Solo tienes que apuntarte aquí para recibirlo gratis.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad , así podrás añadir otro . Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
